El método científico no es exclusivo de la ciencia experimental: puede ser una herramienta valiosa para tomar decisiones empresariales con datos, pensamiento crítico y mejora continua.
En este webinar organizado por Talenmo, se abordó cómo aplicar el pensamiento científico a la estrategia de la empresa. El ponente explicó los seis principios fundamentales del método y propuso un autodiagnóstico para evaluar el grado de cientificidad del pensamiento organizacional.
Los seis principios del método científico aplicados a la empresa
1. Los datos son sagrados
- Los datos deben ser respetados y no manipulados.
- Es fundamental entender el significado real de los indicadores y su contexto.
- Se planteó un cuestionario sobre uso de cuadros de mando, coherencia de indicadores y separación jerárquica en la recogida de datos.
2. Los modelos son simplificaciones, no la realidad
- Un modelo es útil si permite predecir con fiabilidad, aunque no lo explique todo.
- La fiabilidad deseable en empresa es del 90% (1 sigma).
- Se plantearon preguntas sobre el uso de modelos predictivos y su aplicación con sentido.
3. Las mejores preguntas son las más incómodas
- El pensamiento crítico es clave para identificar errores y oportunidades.
- Se destacó la importancia de compartir indicadores, analizar desviaciones presupuestarias y permitir que los empleados planteen problemas.
4. Toda hipótesis puede y debe ser superada
- La mejora continua debe formar parte del ADN organizacional.
- Se diferenció entre ciencia y pseudociencia en función de su apertura al cambio.
- Se animó a revisar periódicamente los modelos y evitar justificar decisiones con anécdotas o dogmas.
5. La navaja de Ockham: la explicación más sencilla suele ser la más probable
- Entre dos explicaciones, elegir la que requiere menos supuestos.
- Ejemplos extremos sobre vacunas y teorías conspirativas ayudaron a ilustrar este principio.
- Preguntas clave: ¿Analizamos ideas y no personas? ¿Buscamos soluciones y no culpables?
6. Revisión por pares
- En ciencia, es el sistema que asegura que las publicaciones sean fiables.
- En la empresa, equivale a fomentar el escrutinio cruzado entre departamentos.
- Se propuso permitir que los departamentos revisen procesos ajenos con ánimo constructivo.
Cuestionario de autodiagnóstico
Durante el webinar, se construyó un cuestionario con múltiples indicadores para que cada participante evaluara si su empresa:
- Respeta los datos
- Comprende sus modelos y limitaciones
- Fomenta el pensamiento crítico
- Mejora continuamente
- Toma decisiones simples y eficientes
- Practica la revisión cruzada
Se propusieron puntuaciones para categorizar a la organización como:
- Aprendiz de brujo (0–15 puntos)
- Científico loco (16–24 puntos)
- En el buen camino (25–29 puntos)
- Nivel Nobel (30 puntos)
Aplicación práctica y debate final
Los asistentes plantearon dudas sobre:
- Uso de datos objetivos en contextos inciertos.
- Diferencia entre pensamiento crítico y creativo.
- Riesgos de pensamiento grupal y sesgo del liderazgo.
- Cómo manejar datos cargados manualmente con criterios subjetivos.
- Utilidad de los datos históricos en entornos cambiantes.
Se subrayó que:
- Las ciencias sociales requieren modelos menos precisos, pero igual de rigurosos.
- La interpretación correcta de los datos es clave para no caer en errores sistémicos.
- El aprendizaje continuo es un factor de longevidad y bienestar.
Conclusión
El pensamiento científico es una filosofía de acción que se basa en el respeto a los datos, la revisión constante, la mejora continua y la apertura al cuestionamiento.
Adoptar esta mentalidad puede convertir a las organizaciones en sistemas más inteligentes, adaptables y resilientes ante la incertidumbre.
¡Te invitamos a ver el webinar completo y a reflexionar sobre cómo incorporar el método científico a la estrategia de tu empresa!